I am a material girl

Living in a material world

And I am a material girl
You know that we are living in a material world
And I am a material girl

Sí, lo admito, soy una material girl. Me encanta las cosas lujosas, ir a cenar a restaurantes caros y tomar capuccinos en cafeterías de diseño, viajar y alojarme en hoteles con encanto... Pero, sobre todo, me encanta ir de tiendas y gastar el poco dinero que tengo en trapitos nuevos cada temporada, probarme el modelito de turno y disfrutar del placer de ver que te hace menos cintura de la que tienes o lucir esas botas de caña alta que estilizan las piernas y encima te ayudan a crecer unos centímetros sin necesidad de cirujía. Quizá sea una frívola al admitir esto, pero lo cierto es que un día fructífero de compras puede elevarme el ánimo casi tanto como devorar una tableta de chocolate negro. Quizá al día siguiente sienta como si me hubieran pegado una patada en el estómago cuando compruebe el saldo del banco, pero hoy me siento eufórica y tengo ganas de compartir mi alegría shoppingera con vosotros. Y en especial siento la necesidad de gritar a los cuatro vientos que ¡ADORO PRIMARK! Realmente ha sido uno de los mejores descubrimientos de los últimos dos años y por ello he de dar las gracias a mis amigas las gemelas por descubrirme en aquel viaje que hicimos a Londres el maravilloso mundo de la ropa super low cost. Aún hoy sigo sorprendida de la cantidad de ropa (casi he renovado mi armario de otoño/invierno) que he podido comprar con tan poco dinero. Si hubiera ido a cualquiera de las otras tiendas consideradas low cost a las que estoy abonada (lease H&M, Stradivarius, promod, berska...) con el mismo dinero no me habría llevado ni la mitad de cosas. Lástima que no haya ningún Primark en Palma y tenga que conformarme con ir una vez cada x tiempo aprovechando mis estancias en Barcelona.

Una de las prendas de las que más contenta estoy es esta camisa larga estilo boyfriend para llevar con leggins y cinturón ancho a modo de minivestido. Me gustó tanto como quedaba y el precio era tan bueno que acabé llevándomela también en rojo. Lo que más me cautivó fueron las pequeñas chorreras que lleva alrededor de los botones.

Aunque ya tengo varias chaquetas, abrigos y cazadoras, no pude resistirme cuando vi el precio de esta chaqueta tres cuartos inspiración militar con tela de abrigo en marrón chocolate; es muy cómoda y calentita y además estiliza. Cuando mi mama dijo que ella también la llevaría y me pagaría la mitad de su valor, no pude hacer más que meterla en la bolsa de compra.

Aún no tenía unas botas con plataforma y éstas encima eran muy cómodas, así que a la saca xD. Yo las quería en negro, pero no había mi talla, así que tuve que cogerlas en gris perla, que también era bonito. Quedan mejor con leggins que con vaqueros.

Lo mejor para el invierno son los jerseys y como en Primark los tienen tirados me llevé dos en dos colores que combinan muy bien con mi color de pelo.



Además compré dos pijamas muy cutes para no pasar frío este invierno, dos pares de guantes de lana (rojo y crema), los ya típicos calcetines y el pack de bragitas (cada vez que voy he de llevarme uno de cada) y una banda de lana violeta para mantener calentitas las orejas.

Y por fortuna no vi nada más que me gustase que si no... Eso sí, hasta dentro de un mes como mínimo no volveré a comprarme nada. Palabra de una material girl

Para terminar os dejo con la canción de la gran Madonna que da título a mi post. Qué la disfrutéis.

Como es muy tarde, ya colgaré mañana algunas de las fotos que nos hicimos en la cafetería Big's JS y uno de los experimentos culinarios de Pol xD